Tantoyuca, Ver. — Gran consternación ha generado el fallecimiento de la querida maestra Minerva Guerrero Cruz, quien este mes de octubre planeaba retirarse oficialmente del servicio docente, culminando una trayectoria marcada por la alegría, el compromiso y el amor por la niñez.

Reconocida por su espíritu positivo, su carisma inigualable y los inolvidables shows infantiles que ofrecía en escuelas, la maestra Minerva no solo dejó huella en el magisterio, sino también en los corazones de miles de niñas y niños, especialmente en comunidades indígenas donde, en sus últimos años, redujo sus tarifas para llevar sonrisas a quienes menos tienen.

🕊️ Su vida se apagó la tarde de este jueves en un hospital de alta especialidad en la Ciudad de México, donde luchaba por recuperarse de las graves lesiones que sufrió tras haber sido privada de su libertad el pasado 28 de junio.

De acuerdo con los reportes, la maestra fue sustraída de su domicilio por sujetos desconocidos y apareció al día siguiente brutalmente golpeada, siendo ingresada primero al Hospital General de Tantoyuca y posteriormente trasladada a Huejutla, Hidalgo, antes de ser canalizada a la capital del país, donde finalmente perdió la vida debido a lesiones internas de gravedad.

El gremio educativo, amigos, familiares y comunidades enteras hoy lloran su partida, recordando no solo a una educadora ejemplar, sino a una mujer valiente, alegre y comprometida con su gente.
📚 “Su vocación, su sonrisa y su lucha permanecerán con nosotros”, expresaron compañeros del sector educativo, quienes exigen justicia ante el terrible hecho que le costó la vida a una maestra que solo quería cerrar su ciclo laboral llevando alegría, como siempre lo hizo.